Coger a los niños en brazos
Con la primera iba perdida del todo y sucumbí algún que otro consejillo de abuela_ "No la cojas que se malacostumbra", la dejé llorar bastante. Los dos chicos vienieron seguidos, ella fue la mayor de tres con sólo dos años y cuatro meses. Dejarles llorar la mayoría de veces simplificaba alguna que otra tarea como el visto a uno, y después a otro, y ahora te toca a tí (estás llorando, lo se).. .. y pasaron unos años hasta que puse cierto orden para escuchar a mi propio instinto. No era otro que cójelo que lo necesita. y las palabras de Carlos González me hubiera gustado escucharlas antes... Pinchen vídeo si les apetece..
Es que yo no los doy cogido más, que sino, más que los cogía.
ResponderEliminarCuando sean mayores ya no los podré coger, entonces me arrepentiré de no haberlo hecho antes.
Mis hijos son muy cariñosos (el pequeño no tanto) y enseguida saben a donde tienen que agarrarse si tienen miedo, y, con respecto a las noches, se duermen solitos sin ningún problema. Eso sí, si lloran en algún momento, saben que yo iré a consolarlos y a intentar ayudarlos para conciliar de nuevo el sueño.
Creo que debemos criar a los hijos con el corazón y con la cabeza.
Biquiños
Totalmente deacuerdo. Además los brazos, los achuchones, los besos, en definitiva ese contacto físico les tantísima seguridad.
ResponderEliminarYo estoy ahora recuperando esos 3 primeros años que para mí fueron de supervivencia. También están contentos ahora..... pero cada cosa a su tiempo.
Me encanta oir que tus hijos buscan y encuentran.
Un besazo!
Pues la verdad es que yo nunca entendí eso de que cogerles en brazos era malo. Tengo dos hijos muy seguiditos y no hay brazos para los dos en todo momento, menos ahora que estoy embarazada, pero como dice Leles saben que cuando tienen miedo, o tienen pena, una pupa o simplemente quieren un besito o un abrazo, aquí está mamá.
ResponderEliminarClaro que llegará un momento en que ya no querrán todas estas cosas, y seré yo quien las necesite... así que aprovecho ahora todo lo que puedo.
Es lo mismo que dormir con papá y mamá... yo no he conseguido que duerman en su cama, que quede claro, lo cierto es que me gustaría que ellos supieran cual es su cama y para lo que es y que vengan a la nuestra alguna vez... pero seguro que ellos en algún momento se darán cuenta que están más cómodos solos y que papá y mamá no desaparecen al caer la noche... pero mientras tanto, es demasiado rico darte la vuelta y encontrarte con su carita, jajaja!.